Las conexiones de los equipos eléctricos pueden ser fijas o desmontables. Las primeras son útiles en instalaciones que nunca se van a desconectar, ya que desmontarlos requeriría tiempo y entrañaría riesgos para el sistema.
Las conexiones fijas están formadas por elementos solados entre sí, y con menos frecuencia por elementos unidos mediante soldadura blanda o wire-wrap.
Sin embargo, las conexiones desmontables se utilizan en instalaciones que probablemente haya que montar y desmontar repetidamente utilizando una y otra vez los mismos elementos. Para crear conexiones desmontables se utilizan distintos tipos de conectores.
Son ampliamente utilizadas en la industria automotriz, eléctrica, electrónica y en muchos otros campos tecnológicos. Las ventajas de este tipo de conexiones son sus buenos parámetros de contacto, durabilidad, resistencia a la oscilación y sencillez de ejecución y, como resultado, su bajo precio.
Para crear conexiones de engaste se pueden utilizar:
Estas conexiones cumplen su función si el cable se sujeta correctamente, es decir, si el hilo del cable y el elemento de contacto están limpios, bien preparados y se aprietan con la ayuda de una herramienta de montaje.
La preparación implica la eliminación de parte del aislamiento sin comprometer la estructura de los hilos conductores de la electricidad, así como la selección del cable y del tipo de parámetros del pin o conector.
No se pueden apretar los alambres y solamente puede haber enlaces multinúcleo.
El número de hilos que contiene este cable debe ser tan grande como sea posible. Cuantos más haya, más finos serán y, por lo tanto, mayor será su flexibilidad y su resistencia a fracturas. Cabe destacar que, cuando el cable contiene muchos hilos (como los cables trenzados), aunque varios hilos sufran daños no se ven afectados los parámetros de conexión.
Para trabajar en ambientes hostiles se deben utilizar conexiones con cables de cobre estañado.
Véase también: Conexiones de engaste
Esta forma de unir elementos de un sistema también se utiliza en el ensamblaje de baterías.
Véase también:
El aspecto más importante de las conexiones que pueden desmontarse son las juntas. Los elementos de contacto pueden ser:
Los terminales de tornillo permiten conectar alambre o cable. Son sencillos y duraderos. Se pueden encontrar con frecuencia en el campo de la ingeniería eléctrica y en aplicaciones de potencia media y alta.
Los conjuntos de conector macho y conector hembra constituyen una amplia gama de productos, lo que permite crear conexiones cable-cable y cable-placa en prácticamente cualquier configuración.
Las conexiones con pinza de muelle permiten crear conexiones mediante la inserción del cable en los orificios del conector, donde se queda mecánicamente atascado y eléctricamente conectado. Admiten alambres y cables de unos 0,5 mm2 hasta 2-4 mm2. Se utilizan en ingeniería eléctrica y electrónica. Este tipo de conexiones son cada vez más populares porque son duraderas y fáciles de realizar, sin necesidad de herramientas especiales.
Véase también: Conexiones desmontables
Al elegir el tipo de cable que vamos a utilizar para conexiones desmontables y fijas debemos prestar atención a si se trata de un tipo común y, por lo tanto, a si es un cable sencillo o multihebra, además de fijarnos en su eficacia. Tampoco podemos olvidarnos de la capacidad de aislamiento, por lo que deberemos estar atentos a la tensión de funcionamiento y al rango de temperatura que admite. También es muy importante conocer la cantidad de hilos que forman el cable. Todos estos elementos influyen en la calidad de la conexión.